Ayer se produjo un accidente en la troqueladora Asahi, al caer el portatroqueles, por motivos que aún no se conocen, sobre la mano de Alberto Rodríguez García.
Fueron los compañeros los que le auxiliaron rápidamente y le llevaron a Cellosa, y de ahí a Madrid. Al final parece que ha habido suerte y las lesiones no son tan graves como parecía en principio.
Un gran susto que podría haber tenido consecuencias muy graves y que esperemos que en la investigación se aclaren las causas y se pongan todos los medios necesarios para que no vuelva a suceder nada parecido.
Queremos agradecer a Jesús Martí y a Alejandro Muñoz su interés y preocupación por este tema. Y también transmitir nuestra preocupación por el funcionamiento de la Mútua, que no es eficaz y que no ha atendido a Alberto como debía.